"El gobierno de esta nación africana expidió la ley que además, puede imponer multas de hasta US $40.000. Hasta el momento, es la medida más drástica en el planeta frente a esta problemática ambiental"
De ahora en adelante en Kenia, producir, consumir e incluso cargar bolsas plásticas puede llevar a un ciudadano a la cárcel por 4 años. O, si lo prefiere, tiene la opción de cancelar una multa de US$40.000 para que se compense los efectos dañinos sobre el medio ambiente que tiene esa clase de productos.
De esta manera esta nación se posiciona como el país con la legislación más estricta en términos de disminución de la contaminación con referencia al plástico. Otras 40 naciones han intentado desincentivar la utilización de estas bolsas, bien sea por medio de cobro de tributos o por medio de restricciones. Pero hasta el momento, ninguna nación había alcanzado la penalización por su utilización.
Esta problemática es muy grave: de seguir el planeta con sus hábitos de consumo actuales, para el año 2050 habrá más plástico que peces en el mar, señaló un informe publicado por el Foro de Davos y realizado con la organización Ellen MacArthur.
Además del deterioro de las aguas, las bolsas de plástico que van a parar en el mar representan un peligro para las tortugas y otros peces que se las comen al pensar que son comida y, seguidamente, se asfixian.
Esta medida del gobierno de Kenia, que se comenzó a gestar hace una década, es la que coloca barreras tanto para productores como para consumidores. De hecho, la ministra de ambiente, Judy Wakhungu, dijo que la medida se aplicará inicialmente a los manufactureros.
Esta medida no tiene muy contentos a los productores de esta nación. Según con el medio The Guardian, La Asociación de Manufactureros de Kenia, dijo que esta medida le costará el empleo a 60.000 kenianos y obligará a 167 manufactureros a cerrar sus fábricas. Y es que esta nación es líder en exportación de este producto en la región y mensualmente consume 24 millones de bolsas.(Lee también: Alarmante, "Cada segundo arrojamos más de 200 kilos de plástico en los océanos)