En los últimos años han resultado algunas enfermedades que no necesitan medicamentos para ser tratadas, ya que solo hacen parte del pensamiento y de las creencias de cada individuo, no solo se trata del estrés sino de los pensamientos negativos las que crean un ambiente enfermizo, por la misma razón que un cambio de actitud puede generar un estímulo sanativo, algo que en ocasiones se puede determinar como un efecto placebo, algo que para la medicina avanzada se puede discernir como la medicina popular derivada de la experiencia común.
Jo Marchant, periodista científica ha presentado uno de los panoramas más completos de la sanación cuerpo mente, en el libro publicado bajo el nombre de Cure, no solo se trata de estudios científicos, sino también de testimonios de personas que se han logrado curarse gracias al cambio de pensamiento, considerando este método como una evidencia científica que un gran porcentaje de enfermedades parten de un manejo inadecuado de los pensamientos y las nociones erróneas del porque nos sentimos enfermos.
Muchos han sido los procesos mentales aplicados a pacientes en los hospitales, para contrarrestar algunos efectos, tales como las pastillas placebo que aun sabiendo que no funcionaran en los pacientes los convencen para que tengan un buen efecto, aunque solo estén compuestas por harinas y sustancias que se asimilan a los medicamentos tradicionales.
Una respuesta de sanación intervenida por el pensamiento parce operar en sentido contrario al estrés, es decir: que las enfermedades tienen un atenuante de gravamen, relacionado con el estrés por lo tanto ponerse en una posición de combate puede ser sumamente benéfico para nuestra salud si confiamos en nosotros mismos.
El optimismo tiene una capacidad de reducir los niveles inflamatorios producidos por las hormonas, la misma función que cumple el cortisol, también se relaciona con la reducción de la susceptibilidad a las enfermedades al reducir las actividades del sistema nervioso simpático y activando las actividades parasimpáticas, esta última reemplaza las primeras condiciones de huir o luchar por unas más agradables como descansar y comer.
Talvez este sea el comienzo del cambio de paradigmas, aunque será muy difícil quitarle el poder a las empresas farmacéuticas que entregan tratamientos médicos a diestra y siniestra y de la nada se incrementan los pacientes crónicos que generan dependencia a los medicamentos, esta es una alternativa menos costosa a los elevados costos de un tratamiento, no solo se trata de sanar el cuerpo sino también la mente para mantener un equilibrio corporal.
La evidencia del efecto placebo o de sanación del cuerpo mediante el convencimiento de la mente, ya ha generado muchos planteamientos científicos, pero mientras estas inquietudes siguen su camino es mejor que la salud sea tratada de una manera más humana dejando de lado la implementación de fármacos que poco a poco van generando dependencia y sumiendo el organismo en enfermedades crónicas. (Lee también: reír es gratis y benéfico para la salud)